En el partido de apertura de la Copa de la Liga Profesional, Instituto y Riestra empataron 0 a 0. A pesar de jugar con 10 jugadores desde los 39 minutos del primer tiempo debido a la expulsión de Gregorio Rodríguez, el equipo local estuvo más cerca de conseguir la victoria.
En el primer encuentro de la zona A de la Copa de la Liga Profesional, Instituto y Riestra empataron sin goles, marcando el debut absoluto del club de Buenos Aires en la máxima categoría.
Durante la etapa inicial, el equipo local propuso más, adoptando un esquema ofensivo liderado por los volantes Roberto Bochi y Gastón Lodico, quienes se destacaron en la recuperación rápida. Sin embargo, el equipo se veía largo entre líneas y carecía de buenas conexiones con los delanteros. La participación poco influyente de Silvio Romero, bastante aislado, obstaculizaba los intentos de la «Gloria» de crear peligro en el área rival. Solo Guido Mainero, con algunas acciones aisladas, ofrecía una esperanza para aportar la cuota de fútbol que faltaba en esa cálida noche en Alta Córdoba.
Por su parte, el equipo visitante se resguardaba cerca de su arco, adoptando una línea defensiva de cinco bien definida, con la intención de conservar su portería invicta y buscar oportunidades de contraataque.
Nicolás Benegas destacó con cierto desequilibrio cuando tenía la pelota en sus pies, aunque Deportivo Riestra no lograba establecer sociedades que le permitieran llegar con más jugadores al arco de Manuel Roffo, quien no experimentó mayores dificultades.
La expulsión de Gregorio González cerca del final del primer tiempo cambió el panorama, ya que Riestra, con un hombre más, podría animarse a atacar con mayor cantidad de futbolistas en el segundo tiempo.
En el segundo tiempo, el equipo visitante optó por no arriesgar más y dejó la sensación de que podría llevarse algo positivo en su debut en la máxima categoría, ya que su plan se desarrolló como lo habían planeado y el arquero, exjugador de Instituto, Ignacio Arce, apenas tuvo complicaciones.
A pesar de los intentos continuos de los dirigidos por Diego Dabove, en esa segunda mitad se logró ver algo del potencial de Romero, quien luego fue sustituido. Sin embargo, estas aproximaciones no fueron más allá de simples insinuaciones, en un partido que nunca adquirió intensidad y se sumergió en una tranquilidad que incluso se trasladó a las gradas.
La «Gloria» volverá a jugar como local en Alta Córdoba el próximo lunes contra Atlético Tucumán en la segunda fecha, mientras que Riestra visitará a Argentinos el miércoles en La Paternal.
