La FIFA rechazó la apelación, confirmando la suspensión de tres años para Luis Rubiales. En consecuencia, el ex presidente de la RFEF no podrá participar en ninguna actividad relacionada con el fútbol. Esta decisión se produce un día después de que la justicia española propusiera su enjuiciamiento, junto al director deportivo Albert Luque, al exentrenador Jorge Vilda y al exresponsable de marketing Rubén Rivera.
La Comisión de Apelación de la FIFA ratificó este viernes la suspensión por tres años de actividades relacionadas con el fútbol para el expresidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, debido al incidente del beso forzado a la jugadora Jennifer Hermoso durante la ceremonia de premiación del Mundial de Australia y Nueva Zelanda 2023.
Tras examinar la documentación presentada, la Comisión decidió rechazar la apelación y confirmar «la sanción impuesta al Sr. Rubiales».
En el comunicado, la FIFA expresó que «entre otras consideraciones, la Comisión de Apelación confirmó que el Sr. Rubiales se comportó de una manera contraria a los principios contemplados en el artículo 13 del Código Disciplinario de la FIFA durante y después» de la final del Mundial femenino, ganado por España el 20 de agosto pasado en Sydney. Este artículo aborda la «conducta ofensiva y violaciones de los principios del juego limpio».
La FIFA destacó que la decisión se ha notificado a Rubiales y recordó que esta medida «se puede recurrir ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo».
La Comisión Disciplinaria de la FIFA había sancionado a Rubiales en octubre, inhabilitándolo «para ejercer cualquier actividad relacionada con el fútbol durante tres años, tanto en el ámbito nacional como internacional, al considerar que su conducta infringió el artículo 13 del Código Disciplinario».
A pesar de la apelación presentada por Rubiales, la FIFA no aceptó la solicitud del ex presidente de la RFEF, quien, por consiguiente, estará inhabilitado para participar en cualquier actividad relacionada con el fútbol durante tres años.
La decisión de la Comisión de Apelación de la FIFA se produce un día después de que la justicia española propusiera el enjuiciamiento de Luis Rubiales por el beso en la boca no consentido a la futbolista española Jenni Hermoso durante la entrega de medallas en el Mundial, así como por las presiones posteriores a la jugadora para minimizar lo ocurrido.
Las imágenes de este incidente dieron la vuelta al mundo, junto con las de Rubiales realizando gestos obscenos en el palco del estadio de Sydney, a pocos metros de la reina Letizia y la infanta Sofía.
A pesar de que inicialmente Rubiales se negó a renunciar a la presidencia de la Real Federación Española de Fútbol, la presión desde el gobierno español, la justicia y el mundo del fútbol lo llevó a dimitir de su cargo el 10 de septiembre pasado.
